domingo, 31 de enero de 2010

Tumbada estoy

encima de una hoja que nada en el mar, escucho el bullicio que hay en mi cabeza, peces que se mueven en todas direcciones, salpicando, agitando las colas levantan la arena y se esconden entre las plantas porque han olido el peligro, esperan. Sonrío, con la mano dentro del agua y sintiendo el sol en la cara, disfruto de este momento tan caro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario